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El Bayern paga la cláusula de la estrella del Dortmund.
Si en algo coinciden los especialistas del mundo del fútbol es en avalar la tendencia a la concentración de los grandes jugadores en un menor número de clubes, fomentando así una desigualdad que cada día se hace más patente, tanto a nivel doméstico como continental. El primer bombazo del mercado de fichajes de cara a la temporada 2013/14 es un claro ejemplo. El todopoderoso Bayern se hace con los servicios de Mario Götze, jugador estrella de su máximo rival, el Borussia de Dortmund.



 Ya apenas se pueden reducir los equipos de nivel a cuatro o cinco nombres que cada verano se dedican a aumentar la diferencia entre ellos el resto
Al equipo bávaro le fue suficiente con abonar su cláusula de rescisión, insuficiente a mi parecer, de 37 millones de euros para contar con la joven perla del fútbol alemán. Durante los últimos años el crecimiento de la Bundesliga en cuanto a organización ha sido intachable, a esto hay que unir la mayor competitividad ofrecida por sus equipos a nivel europeo, qué mejor evidencia de ello que la cuarta plaza champions recientemente adquirida en detrimento de la liga italiana. Aunque si algo se le ha podido achacar al campeonato germano ha sido la desigualdad del mismo, especialmente en la última liga, decantada en favor del Bayern a falta de 6 jornadas para el final y con una media de goles por partido de 3 a favor y 0,5 en contra. Si bien es cierto que el vencedor de las dos anteriores ligas fue el hoy segundo clasificado, Borussia de Dortmund, ha quedado claro que no es capaz de competir liga y champions y menos con un líder a este ritmo de victorias. Debe ser que al Bayern no le ha parecido suficiente con romper todos los récords de la historia reciente de la Bundesliga y ha decidido directamente intentar evitar que sus rivales no logren afianzarse como alternativas reales a golpe de talonario. El club bávaro parece más preocupado de arrebatar promesas que de construirse su propio equipo, mucho más necesitado de refuerzos en otras zonas del campo como pueda ser la portería o el centro de la zaga.
 Las casas de apuestas han cambiadoel quién por el cuándo
Aunque este no es un fenómeno aislado, claros ejemplos son el fichaje de Van Persie por el Manchester United, que según recientes declaraciones de Roberto Mancini, fue el que decidió la Premier League, o las incorporaciones de hombres clave en su momento del Valencia al Barcelona como Villa o Jordi Alba. Ya apenas se pueden reducir los equipos de nivel a cuatro o cinco nombres que cada verano se dedican a aumentar la diferencia entre ellos el resto.
Para confirmarlo qué mejor que el maravilloso desenlace que han tenido las grandes ligas para dilucidar sus campeones. En Inglaterra el Manchester United campeón a falta de cinco jornadas, el Bayern a falta de seis, ¿cuántas le sobrarán a Barcelona y Juventus? Las casas de apuestas ya han cambiado el quién por el cuándo. Uno debe marcharse a Holanda para disfrutar de la tensión que suponen unas últimas jornadas de infarto entre varios equipos que sueñan con lograr el título. 
Por desgracia la única alternativa a este brutal dominio son los caprichos de las grandes fortunas, como por suerte han podido vivir en el PSG y Manchester City, logrando catapultarse hacía la cada vez más exclusiva élite futbolística. Aunque uno no sabe si es peor el remedio o la enfermedad. El fútbol necesita un intervencionismo por parte de las grandes instituciones que nos aseguren el espectáculo equilibrado y competido que se merece el deporte rey.
@Mhn17
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